Después del Mundial que hicieron, ¿son candidatos para ganar la Copa América?
Para mucha gente sí. Nosotros sabemos que somos una selección competitiva. Hemos hecho un buen Mundial, como lo podría haber hecho Chile, que estaba bien, o Argentina, Brasil también... Se dio la circunstancia. Pero creo que hoy en día el fútbol está muy parejo. Hay grandes selecciones, y Argentina es local y obviamente siempre es considerada favorita y más con los jugadores que tiene.
¿Pero no es una presión extra?
Pero están acostumbrados a tener la presión, aunque es una presión diferente. Como nosotros también tenemos la presión de hacer una buena Copa América.
¿Dónde nace la presión de Uruguay?
Todo el mundo espera eso después de haber hecho un gran Mundial.
En lo personal, ¿cómo asume el reto de jugar la Copa América después de haber sido elegido el mejor futbolista de Sudáfrica?
Es un reto importante porque la gente tiene muchas expectativas. Uruguay está al lado de Argentina, y después de cómo se vivió el Mundial, la gente viajará para ver los partidos de la selección uruguaya y eso se sentirá mucho. Es un reto importante, un reto difícil.
¿Llega bien a la Copa?
Mejor que al Mundial.
¿No le perjudicó la falta de continuidad con Quique Sánchez Flores?
Uno siempre quiere jugar. Pero no, siento que no.
¿Por qué?
Porque el hecho de no haber jugado tanto en los últimos meses, por los problemas personales que el entrenador tuvo conmigo, me permitió descansar bastante. Pero llego bien al torneo, con muchas ganas de hacer una buena Copa América.
¿Y el futuro?
Tengo dos años más de contrato. Hay rumores que el club busca mi salida, pero yo estoy muy tranquilo. Me quedan dos años de contrato y pienso cumplirlo. Yo tengo la cabeza metida en la Copa. Falta muy poco para el debut. Tenemos una ilusión bárbara y confiamos en lo que tenemos. Hay un gran equipo y variedad de jugadores, pero vamos con un respeto enorme sobre todos los rivales.
¿Qué conclusiones saca de su cierre de temporada en el Atleti?
Traté de quedarme con lo positivo. Con el trabajo. Siempre de lo malo se saca algo bueno, y en este caso, donde lo malo fue no jugar en el final de la temporada, lo positivo fue poder entrenar duro y trabajar doble y hasta triple turno para estar bien para la selección. Recargué las pilas.
¿Qué le genera la llegada de Manzano?
Le deseo lo mejor. Porque si le va bien, le irá bien al Atléti y a todos también.
Para mucha gente sí. Nosotros sabemos que somos una selección competitiva. Hemos hecho un buen Mundial, como lo podría haber hecho Chile, que estaba bien, o Argentina, Brasil también... Se dio la circunstancia. Pero creo que hoy en día el fútbol está muy parejo. Hay grandes selecciones, y Argentina es local y obviamente siempre es considerada favorita y más con los jugadores que tiene.
¿Pero no es una presión extra?
Pero están acostumbrados a tener la presión, aunque es una presión diferente. Como nosotros también tenemos la presión de hacer una buena Copa América.
¿Dónde nace la presión de Uruguay?
Todo el mundo espera eso después de haber hecho un gran Mundial.
En lo personal, ¿cómo asume el reto de jugar la Copa América después de haber sido elegido el mejor futbolista de Sudáfrica?
Es un reto importante porque la gente tiene muchas expectativas. Uruguay está al lado de Argentina, y después de cómo se vivió el Mundial, la gente viajará para ver los partidos de la selección uruguaya y eso se sentirá mucho. Es un reto importante, un reto difícil.
¿Llega bien a la Copa?
Mejor que al Mundial.
¿No le perjudicó la falta de continuidad con Quique Sánchez Flores?
Uno siempre quiere jugar. Pero no, siento que no.
¿Por qué?
Porque el hecho de no haber jugado tanto en los últimos meses, por los problemas personales que el entrenador tuvo conmigo, me permitió descansar bastante. Pero llego bien al torneo, con muchas ganas de hacer una buena Copa América.
¿Y el futuro?
Tengo dos años más de contrato. Hay rumores que el club busca mi salida, pero yo estoy muy tranquilo. Me quedan dos años de contrato y pienso cumplirlo. Yo tengo la cabeza metida en la Copa. Falta muy poco para el debut. Tenemos una ilusión bárbara y confiamos en lo que tenemos. Hay un gran equipo y variedad de jugadores, pero vamos con un respeto enorme sobre todos los rivales.
¿Qué conclusiones saca de su cierre de temporada en el Atleti?
Traté de quedarme con lo positivo. Con el trabajo. Siempre de lo malo se saca algo bueno, y en este caso, donde lo malo fue no jugar en el final de la temporada, lo positivo fue poder entrenar duro y trabajar doble y hasta triple turno para estar bien para la selección. Recargué las pilas.
¿Qué le genera la llegada de Manzano?
Le deseo lo mejor. Porque si le va bien, le irá bien al Atléti y a todos también.
